El cambio climático y una población creciente ejercen presión sobre cultivos esenciales en regiones de bajos ingresos
Press and NewsCultivos como el banano, la papa y la yuca son esenciales para la seguridad alimentaria en las regiones más pobres del mundo. Hacia el año 2050, su importancia se incrementará, pero el cambio climático y el crecimiento demográfico ejercerán una presión sin precedentes sobre la producción
El cambio climático y el crecimiento demográfico son preocupaciones crecientes para la seguridad alimentaria mundial. La modelación de tendencias agrícolas futuras que den cuenta de estos cambios sísmicos es esencial para comprender la oferta alimentaria y la generación de ingresos, especialmente en los países de bajos ingresos. Las investigaciones a menudo se enfocan en cultivos de cereales ampliamente consumidos, que forman una parte sustancial de la dieta mundial. Sin embargo, las raíces, los tubérculos y los bananos son el pilar de las dietas en muchas de las regiones más pobres del planeta, y un nuevo análisis demuestra que estos cultivos poseen un gran potencial para reducir la malnutrición y la pobreza hasta 2050, siempre y cuando se les destinen inversiones bien dirigidas. Conocidos como RTB, estos cultivos incluyen plátano, yuca, papa, batata, ñame y raíces y tubérculos tropicales y andinos. Son algunos de los cultivos más valiosos en las regiones más pobres a nivel mundial. Ricos en nutrientes, vitamina A y carbohidratos, los RTB a menudo superan a los cereales en términos de energía por hectárea cultivada y pueden producir altos rendimientos bajo condiciones hostiles – incluidos los eventos climatológicos extremos que van de la mano con el cambio climático. Estos rasgos hacen que los RTB tengan particular importancia para las poblaciones que sufren desnutrición como en algunos países subsaharianos, en donde aportan hasta un 50 por ciento del consumo diario de calorías. Es más, tienen un rol significativo en la generación de ingresos y con frecuencia son las mujeres quienes los cultivan y comercializan. “Los RTB son el pilar de las dietas y los medios de vida rural en muchas regiones de escasos recursos”, afirmó Guy Hareau, investigador del Centro Internacional de la Papa (CIP) en Perú y coautor del análisis publicado en Global Food Security. “Sin embargo, la baja inversión limita la superación de los retos de la productividad y del mercado”. Los RTB solamente reciben una fracción de la atención que se le brinda a otros productos básicos alimenticios. El número de investigadores dedicados a los cultivos de RTB en África, Asia y América Latina durante 2010–2014 fue de tan solo un tercio de la cantidad dedicada a cereales y ganadería, según el análisis. Esta baja inversión también se ve reflejada en el vacío en la literatura sobre cultivos de RTB, que se requiere para fundamentar intervenciones y políticas sobre seguridad alimentaria. Se justifica una mayor atención no solo por la seguridad alimentaria y la nutrición. Algunos RTB se cultivan para propósitos industriales, incluida la yuca para producir almidón, y la papa para biocombustibles. El crecimiento en estas industrias podría incrementar la demanda incluso más de lo proyectado. “Un tema en el que hace falta más estudio es hasta qué punto la industria incrementará la demanda de estos cultivos de primera necesidad para producir biocombustibles y almidón”, comentó Steven Prager, coautor del análisis por parte del Centro Internacional de Agricultura Tropical (CIAT) y colíder de la Iniciativa de CGIAR Futuros Globales y Prospección Estratégica. “Debemos examinar seriamente cómo estos humildes cultivos se enganchan con los mercados mundiales y cómo las decisiones en políticas en el mundo pueden afectar los mercados para estos cultivos, en el presente y en el futuro”. Enoch Kikulwe, coautor por parte de Bioversity International, comparte el mismo sentir: “Una demanda creciente de biocombustible y almidón industrial es probable que ejerza presión sobre los cultivos RTB, en especial sobre la yuca, que puede ocasionar alzas en los precios, privando de esta manera a las personas pobres de acceder a sus alimentos básicos como se proyecta en esta investigación”. RTB, hoy y mañana El análisis fue llevado a cabo por investigadores de cinco centros de investigación de CGIAR, incluidos CIP, CIAT, Bioversity International, el Instituto Internacional de Investigación sobre Políticas Alimentarias (IFPRI) y el Instituto Internacional de Agricultura Tropical (IITA). El crecimiento en la producción de RTB ha mostrado un incremento constante en los últimos 50 años, más rápidamente en África, aunque más lento que en los cereales. Asia se ha convertido, hoy por hoy, en la mayor región productora de RTB, con una gran parte del crecimiento concentrado en la producción de papa y batata en China. En América Latina, los RTB son productos importantes de primera necesidad y cultivos comerciales en toda la región. Su rol clave en el suministro de calorías y nutrición hace que sea fundamental examinar las tendencias de largo plazo en el abastecimiento y demanda de RTB para comprender mejor cómo las inversiones focalizadas pueden impulsar su producción. Los estudios existentes, sin embargo, constan de proyecciones primordialmente inadecuadas (limitadas en términos de cobertura geográfica, horizonte de tiempo y rango de cultivos) que no capturan los impactos de los factores socioeconómicos determinantes y del cambio climático.
El estudio parte de una investigación del IFPRI y otros centros de CGIAR que explora las tendencias futuras para los cultivos. El estudio del IFPRI aportó una proyección de línea base para 2050, incluida una evaluación de las diferentes inversiones agrícolas para entender los cambios futuros en cuestiones de seguridad alimentaria. La proyección tiene en cuenta trayectorias socioeconómicas y del cambio climático – a saber, la Trayectoria Socioeconómica Compartida 2 y la Trayectoria de Concentración Representativa 8.5, desarrolladas por el Grupo Intergubernamental de Expertos sobre el Cambio Climático (IPCC) – que siguen un escenario tradicional de cambio más o menos rápido en población, crecimiento económico y cambio climático. “En esta investigación, fue grato acompañar a los colegas de CGIAR para evaluar el rol prospectivo de los RTB en un futuro en el que enfrentamos retos no solamente por crecientes demandas totales y cambios en las dietas, sino también efectos potencialmente adversos del cambio climático sobre los sistemas de producción”, dijo Tim Sulser, coautor por parte del IFPRI. “Las inversiones en investigación y desarrollo para los RTB son importantes para abordar los retos inminentes que enfrentaremos en las décadas por venir”. Usando el escenario de línea de base del estudio y la evaluación relacionada con los cultivos RTB, el nuevo estudio examina cómo se verá la agricultura de los RTB en 2050. El cambio climático y la disponibilidad de agua serán factores claves para la productividad de los cultivos: mientras que el banano y la papa son sensibles al estrés hídrico, la yuca, el ñame y la batata son tolerantes a la sequía. Las condiciones agroecológicas y la pobreza causarán un aumento en el consumo de RTB, en especial en África, lo que indica su importancia cada vez mayor para la seguridad alimentaria. Mientras que la papa sobresale como el cultivo más afectado por las preferencias en constante cambio, especialmente en China, el banano mostrará el mayor crecimiento en oferta y demanda en todas las regiones. El análisis revela además que las inversiones dirigidas y localizadas pueden fortalecer el rol de los RTB como cultivos para la seguridad alimentaria. Específicamente, las inversiones que buscan incrementar la productividad ofrecen mayores beneficios que las inversiones en mejorar el mercadeo.