Una clase diferente de espantapájaros

Una clase diferente de espantapájaros

A mediodía, un agricultor de 60 años de edad termina su almuerzo y revisa una aplicación en su celular. Al día siguiente, esparce fertilizante  en su cultivo.

Esto está sucediendo en Japón. Y podría ser el futuro en Colombia y otras partes del mundo, en donde los productores de alimentos toman decisiones rápidas, inteligentes y precisas sobre sus fincas con base en datos en tiempo real.

En este caso, los datos vienen de una caja blanca y verde, de apenas 8x8 pulgadas.

Este genial invento se llama e-kakashi. En Japón, kakashi significa espantapájaros, que por tradición se usa para disuadir a los pájaros de perturbar las plantas en crecimiento.

Esta versión moderna de un espantapájaros, sin embargo, funciona diferente. E-kakashi funciona con la conexión de un dispositivo matriz a docenas de terminales “bebés” – hasta 100 para ser precisos – que recopilan sin demora grandes volúmenes de datos agrícolas de cientos de sensores ubicados alrededor del campo, incluidos temperatura del aire, humedad relativa, radiación solar, niveles de dióxido de carbono,  temperatura y humedad del suelo. La información ingresa luego a un dispositivo en línea o teléfono celular al que los

E-kakashi

agricultores pueden acceder sin importar en donde se encuentren para ayudarles a decidir cuál será su próximo paso y cuándo implementarlo.

El dispositivo proporciona una aplicación concreta de la “Internet de cosas” (IoT) o la capacidad de conectar artefactos cotidianos a la Internet y entre ellos.

El Dr. Satoshi Ogawa del CIAT compara la forma en la que el aparato funciona con Facebook.

“En Facebook, se puede ver cómo van todos; es lo mismo con e-kakashi, solo que con la agricultura. Puedes visualizar de inmediato cómo van los cultivos, parcela por parcela, planta por planta”, dijo Ogawa, quien está liderando esfuerzos para poner a prueba la capacidad de la tecnología en los campos del CIAT.

De manera que es como recibir actualizaciones automáticas del estado de sus cultivos.

El ensayo de e-kakashi en el CIAT inició hace dos meses. Sin embargo, la campaña de traer la solución innovadora a Colombia empezó en 2015.

En ese entonces, Ogawa y el líder de su equipo el Dr. Manabu Ishitani estaban buscando una manera de monitorear en tiempo real y de forma simultánea cómo las diferentes condiciones climáticas influyen en el desempeño de los cultivos, como parte de un proyecto para desarrollar métodos de producción de arroz que empleen menos insumos y a un menor costo. El CIAT había dependido de un sistema meteorológico que registraba datos en un punto del tiempo y para un solo factor.

Los científicos del CIAT buscaron y se acercaron en su momento a algunas compañías que fabrican aparatos con el propósito de aprovechar el potencial de IoT. El fabricante de e-kakashi PS Solutions inmediatamente se interesó en el plan de Ogawa e Ishitani, con las aspiraciones de poder difundir su tecnología alrededor del mundo.

Para lograr que e-kakashi funcionara en Colombia, PS Solutions recurrió al gigante de la electrónica Hitachi para alterar la tecnología traduciendo el lenguaje del aparato del japonés al inglés y permitiendo el uso de tarjetas SIM disponibles localmente para conectarse a redes de telefonía celular.

“Hace un año, e-kakashi no se podía usar por fuera de Japón”, cuenta Ogawa. “Actualmente, no solamente puede usarse en Colombia, sino también en las Américas y en Asia”.

El CIAT y PS Solutions han instalado hasta ahora cuatro miniterminales para el ensayo actual. La meta es colectar información sobre cómo los cultivos de arroz van progresando con base en datos climáticos, y luego construir un modelo que, por ejemplo, pueda calcular el momento en que las plantas lleguen a etapas críticas como la floración, formación de granos y cosecha, de modo que los agricultores puedan determinar la cantidad de fertilizante a usar, si aumentar o no el riego, o si se necesitará  más mano de obra. El modelo obtenido formará la base de una aplicación que pueda alertar a los usuarios, por ejemplo, cuando el agua en el suelo alcance niveles peligrosos.

Expertos de ambas organizaciones presentarán resultados preliminares del estudio la próxima semana en una reunión internacional de especialistas de arroz de 17 países latinoamericanos. Una vez los hallazgos sean concluyentes, el conocimiento y la tecnología relacionados con IoT en la agricultura será transferida a los agricultores en Colombia y América Latina, a través de la Federación Nacional de Arroceros (FEDEARROZ) de Colombia y el Fondo Latinoamericano para Arroz de Riego (FLAR).

Ogawa considera que los beneficios de IoT pueden ir más allá de impulsar el desempeño de los cultivos.

“El próximo paso es desarrollar una receta para calcular todo”, dijo Ogawa, quien visualiza el uso de e-kakashi y soluciones similares en la medición de emisiones de gases de efecto invernadero con base en los niveles del agua y la temperatura del suelo.

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Información adicional

El estudio de verificación de e-kakashi en el CIAT es parte del proyecto “Desarrollo y adopción de un sistema de producción de arroz en América Latina con bajo uso de insumos mediante mejoramiento genético y tecnologías avanzadas de manejo en campo” bajo la Alianza de Investigación en Ciencia y Tecnología para el Desarrollo Sostenible (SATREPS), un proyecto conjunto de investigación internacional entre Japón y Colombia. Inaugurado en 2014 y financiado por la Agencia de Ciencia y Tecnología del Japón (JST) y la Agencia de Cooperación Internacional del Japón (JICA), SATREPS busca introducir e incorporar tecnologías de manejo en campo de última tecnología y sistemas de producción de arroz con bajo uso de recursos en Colombia y otros países suramericanos.