Brief

Una nueva visión para el futuro de la agricultura familiar de pequeña escala en Centroamérica

De acuerdo con las estimaciones más conservadoras, Centroamérica puede esperar un
aumento de temperatura de por lo menos 3 grados centígrados para 2030, lo que tendrá
un impacto negativo en la producción de alimentos de primera necesidad, especialmente
maíz y frijol, así como cultivos clave de exportación, en particular el café. De hecho, la región ya está
sintiendo los efectos del cambio climático, con fenómenos meteorológicos extremos, como huracanes
y sequías, cada vez más frecuentes y graves.
Para hacer frente a esta amenaza, se requiere un cambio importante hacia prácticas de producción
sostenible y uso de la tierra en la agricultura de pequeña escala, junto con una drástica reducción en la
deforestación. Modificar los patrones actuales en el uso de la tierra agrícola es especialmente urgente
e importante en una región en donde la tierra es el recurso del que más dependen las personas. La
agricultura familiar brinda un medio de vida para el 60% de la población rural de Centroamérica; sin
embargo, el 65% de estas personas están sumidas en la pobreza.