Liberación sistemática de semillas de fríjol para un futuro sostenible
From the Field
En el núcleo del sector agrícola africano, el poder de las semillas de fríjol común de alta calidad es la clave para transformar los rendimientos de fincas de todos los tamaños. Sin embargo, durante años, tanto los pequeños como los grandes agricultores se han enfrentado a un problema persistente: la falta de acceso a variedades de semillas de fríjol de alta calidad. Esto se ha visto agravado por la escasa inversión de las empresas privadas de semillas, lo que frena el crecimiento de la productividad agrícola en todo el continente.
Por Yohane Chideya, Eunice Magwaya, Adon Phiri, Evance Chizula, Wilson Nkhata y Jean Claude Rubyogo
Sin embargo, la situación en Malawi está cambiando. Los productores agrícolas, las agencias gubernamentales, las instituciones de investigación y las partes interesadas del sector privado se están uniendo para mejorar la producción y distribución de semillas. El Centro de Distribución Rápida de la Iniciativa para la Innovación Acelerada en África Meridional (AID-I) ha sido un componente clave de los esfuerzos de Feed the Future para fortalecer los sistemas locales de semillas durante los últimos tres años. Con el apoyo de USAID, esta iniciativa ha venido prestando servicios esenciales de extensión y asesoramiento sobre la producción de semillas de fríjol a pequeños y grandes agricultores.
El Centro Internacional de Mejoramiento de Maíz y Trigo (CIMMYT) y la Alianza de Bioversity International y el CIAT, a través de la Alianza Panafricana de Investigación en Frijol (PABRA), encabezan la agenda de AID-I en Malawi, así como en Zambia y Tanzania. Al colaborar con las principales partes interesadas de la cadena de valor del fríjol para mejorar la calidad y la disponibilidad de las semillas, esta iniciativa garantiza el acceso de los agricultores a variedades mejoradas que pueden aumentar el rendimiento y contribuir a la seguridad alimentaria a largo plazo.
Alianzas para impulsar la multiplicación de semillas de fríjol
Seed Co Malawi es uno de los productores comerciales de semillas que han estado en el centro de estos esfuerzos. La empresa, que cultiva semillas de fríjol de alta calidad NUA45, certificadas en 56 hectáreas de terreno en el predio Chimwamkango del distrito de Mchinji, espera obtener un rendimiento de 112 toneladas. Tras la cosecha, la semilla será certificada por la Unidad de Sistemas de Semillas del gobierno de Malawi, envasada en paquetes de un kilogramo y vendida a precios asequibles a un mínimo de 100.000 pequeños agricultores de todo Malawi a través de la red minorista de la empresa.
Gracias a la gran colaboración con la Alianza, que se ha centrado en garantizar la sostenibilidad de la producción de semillas implicando a los agricultores locales y proporcionándoles apoyo técnico, Seed Co se ha beneficiado significativamente de una serie de formaciones impartidas por PABRA, que se han centrado en la mejora de prácticas agronómicas, como la aplicación de fertilizantes, el uso de pesticidas y técnicas de plantación eficaces para garantizar una producción óptima.
Seed Co no es el único socio que trabaja para ampliar la producción de semillas de fríjol. A las afueras de la ciudad de Lilongwe, en Namitete, la granja McPherson, propiedad de Duncan McPherson, también ha experimentado un crecimiento significativo en la producción de semillas de reproducción desde el primer año de la iniciativa AID-I. La granja ha ampliado sus operaciones para incluir la producción tanto de semillas parentales como de semillas certificadas. Sólo en 2024 ha producido con éxito 32 toneladas de semillas de fríjol en una parcela de 42 hectáreas. La visión de McPherson incluye el apoyo a los pequeños agricultores para que amplíen sus operaciones y cultiven parcelas más grandes, contribuyendo en última instancia al crecimiento del sector agrícola de Malawi.

McPherson (izquierda) guía al equipo visitante durante una visita a su almacén de semillas de fríjol - Foto de Eunice Magwaya
Nuevos ensayos de fríjol para diversificar la producción de semillas
Las perturbaciones climáticas, como las sequías, las inundaciones y las fluctuaciones de temperatura, plantean importantes retos a la agricultura en África, en particular para cultivos básicos como el fríjol común. Estas condiciones pueden repercutir gravemente en los rendimientos, amenazar la seguridad alimentaria y afectar a los medios de subsistencia de los agricultores. En respuesta, investigadores, empresas y organizaciones agrícolas trabajan para desarrollar variedades de fríjol común resistentes y capaces de soportar las diversas condiciones climáticas del continente. Los esfuerzos se centran en crear variedades que presenten rasgos como la tolerancia a la sequía, la resistencia a las enfermedades y la capacidad de prosperar en suelos pobres. En Malawi se están empleando técnicas avanzadas de mejora genética, como la selección asistida por marcadores y la modificación genética, para acelerar este proceso.
Con el apoyo del Growth Poles Project, PABRA y varias empresas de semillas han realizado ensayos para liberar nuevas variedades de fríjol en los distritos de Lilongwe, Kasungu, Zomba, Mchinji, Chikwawa y Balaka. Se están probando 60 variedades –30 de fríjol pinto y 30 de fríjol blanco– procedentes de Colombia, Sudáfrica y Malawi. Entre ellas destacan Bounty, Ranjonomby y las obtenidas en Chitedze. Financiados por Feed the Future/USAID y el Gobierno irlandés a través de Palladium, estos esfuerzos pretenden identificar variedades de mayor rendimiento que puedan rendir hasta 5,5 toneladas por hectárea, sustituyendo a muchos cultivares existentes.

Una sección transversal del ensayo de 60 variedades de semillas de fríjol - Foto de Yohane Chideya
Las primeras observaciones de los ensayos de invierno realizados en diversas regiones de Malawi indican que algunas variedades han tenido un rendimiento excepcional en zonas específicas, debido a las condiciones climáticas favorables, a prácticas de gestión eficaces, como la aplicación adecuada de fertilizantes y el riego constante, además de la presencia de suelos fértiles.
Happy Mbemba, agrónomo de Seed Co Malawi, señaló que los avances logrados tanto en la producción de semillas certificadas como en los ensayos con fríjoles demuestran el poder de la innovación en la investigación: "Prevemos que nuestros esfuerzos transformarán significativamente el sistema de semillas de fríjoles. Nuestro objetivo es que estas nuevas variedades de fríjol estén certificadas y registradas"
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Visitas y valoraciones de los socios
El 11 de septiembre de 2024, una delegación de USAID, CIMMYT y Growth Poles visitó la granja de Seed Co para apreciar cómo la empresa ha estado gestionando la producción de semillas certificadas en Mchinji y los nuevos ensayos de fríjol. A esta visita le siguió otra, el 11 de octubre, de otros socios como Agricane, Milele Agro-processors y Good Nature Agro para identificar los retos encontrados.
Rob Bertram, Científico Jefe de la Oficina de Resiliencia y Seguridad Alimentaria de USAID –acompañado por Elizabeth Venable, Jefa Adjunta de Growth Poles– quedó impresionado por el progreso y el espíritu de colaboración entre los actores clave de la cadena de valor del fríjol de Malawi, todos trabajando para solucionar el déficit de estas semillas:
"El trabajo que se está haciendo aquí es impresionante. Se han necesitado grandes esfuerzos por parte de los socios ejecutores para ponerlo en marcha. Deseamos sinceramente que, con estos esfuerzos conjuntos, Malawi se encamine hacia la mejora del cultivo del fríjol."

Bertram (izquierda) con Nkhata (adelante en el centro) durante una visita a la granja Mchinji mientras otros visitantes observan - Foto de Eunice Magwaya
Camino a seguir e iniciativas futuras
El análisis de los datos se llevará a cabo después de la cosecha para evaluar el rendimiento de las 60 variedades durante los ensayos de invierno, centrándose en la madurez temprana, el tonelaje de rendimiento, la resistencia a las enfermedades y otras variables en diferentes lugares. Los ensayos continuarán en la temporada de lluvias de 2024/25 para evaluar cómo se comportan estas variedades en las mismas zonas cuando caen las lluvias.
Después de las pruebas, se procederá a la selección participativa de variedades, lo que permitirá a las partes interesadas de la cadena de valor del fríjol votar por sus variedades preferidas para su adopción en diversas partes de Malawi. Como algunas variedades ya han sido liberadas en otros países en virtud de protocolos de la región de la SADC, es probable que este proceso acelere su liberación en Malawi.

Los participantes posan para una foto de grupo tras recorrer el ensayo de semillas de fríjol en Mchinji - Foto de Yohane Chideya
Otros socios –entre ellos Laurie Muggleton, gerente de McPherson Farm– hicieron hincapié en la importancia de realizar análisis del suelo para validar la aplicación de fertilizantes y equilibrar sus nutrientes. También destacaron los beneficios potenciales del uso de inoculantes del suelo para mejorar el rendimiento de los cultivos.
Bruce Carruthers, director gerente de Agricane, cuya empresa organizó ensayos similares de fríjoles en Chikwawa –un distrito conocido por sus temperaturas extremas que alcanzan hasta los 37°C– observó: "Nuestro emplazamiento contaba con suelo virgen, lo que contribuyó en gran medida a nuestro éxito, junto con la disponibilidad de agua de surco para el riego por pivote. La aplicación de fertilizantes también desempeñó un papel clave en la obtención de buenos rendimientos. El único inconveniente es que los fertilizantes son muy caros en Malawi. En mi opinión, el invierno en Chikwawa produce más legumbres que la temporada de lluvias".
Wilson Nkhata –coordinador de la Southern Africa Bean Research Network (SABRN)– destacó la importancia de una gestión eficaz de las semillas antes de la siembra, durante el crecimiento y después de la cosecha, como catalizador para lograr buenos rendimientos: "La buena gestión de las semillas desempeña un papel fundamental. Con un manejo adecuado, es probable que las semillas den buenos resultados en las distintas regiones. Tenemos que implicar a más socios a través de los polos de crecimiento para potenciar este esfuerzo. También existe la posibilidad de derechos exclusivos para los socios, por lo que se trata de un acuerdo único".
Justus Chintu, Coordinador Nacional de Investigación sobre Leguminosas del Departamento de Servicios de Investigación Agrícola de Malawi, subrayó la importancia de implicar a los pequeños agricultores en esta iniciativa para que sea sostenible. Afirmó: "Vivimos tiempos interesantes, ya que existe un gran potencial para producir legumbres de alta calidad, como el fríjol común. Las nuevas tecnologías, como estos ensayos, son fundamentales en este esfuerzo. Contar con socios que apoyen estas innovaciones representa un avance positivo significativo."

Se prevé que los ensayos con fríjoles continúen durante la temporada de lluvias 2024/25, que abarca de diciembre a marzo - Foto de Yohane Chideya