Decisiones más informadas en agricultura con el apoyo de inteligencia artificial y estrategias digitales centradas en el humano

La modernización del sector agrícola colombiano es fundamental para enfrentar los desafíos actuales y futuros, tales como la variabilidad climática, la escasez de recursos y las crecientes demandas de alimentos. En este contexto, el uso de inteligencia artificial (IA) y la implementación de estrategias digitales centradas en el humano (DCH) se presentan como soluciones clave para mejorar la eficiencia y sostenibilidad en diferentes niveles de la cadena productiva. Estas tecnologías permiten una toma de decisiones más informada y precisa, basada en datos confiables, lo que es crucial para la adaptación del sector agrícola a condiciones cambiantes. El enfoque de Diseño Centrado en el Humano (DCH) es esencial para desarrollar soluciones ajustadas a las necesidades y características específicas de diversos usuarios, incluyendo pequeños agricultores, grandes productores, extensionistas técnicos y tomadores de decisiones. A través de la investigación de usuario, este enfoque permite identificar modelos mentales, objetivos y desafíos de los usuarios, lo que facilita el diseño de herramientas tecnológicas que se adapten a sus realidades. Ejemplos de la implementación del DCH en países como Honduras, Guatemala y Colombia han demostrado su efectividad para generar productos agroclimáticos adaptados a las necesidades del sector, contribuyendo a una agricultura más sostenible y resiliente. En esta presentación se mostraron casos de estudio en los cuales los algoritmos de inteligencia artificial se utilizaron para procesar información recolectada a través de encuestas, entrevistas y videos, con el fin de identificar diferentes perfiles de usuarios. Estos algoritmos permitieron caracterizar a los usuarios según aspectos clave como los principales obstáculos que enfrentan, sus capacidades, condiciones de vida, necesidades y los canales de comunicación que utilizan a diario. Esta información es fundamental para ajustar las soluciones tecnológicas a las realidades específicas de los usuarios y garantizar una mayor adopción de las herramientas digitales en el sector agrícola. La identificación de estos perfiles también facilita una mejor segmentación de los grupos de interés y contribuye a la creación de soluciones más personalizadas y efectivas para cada tipo de usuario. Finalmente, se discutió el potencial de estas estrategias digitales en otros sectores agrícolas, como la agroindustria de la caña de azúcar, donde el uso de herramientas automatizadas puede mejorar la gestión de recursos y aumentar la productividad. En conclusión, la integración de la inteligencia artificial y las estrategias digitales centradas en el humano tiene el potencial de transformar la agricultura colombiana. Estas tecnologías no solo mejoran la eficiencia y sostenibilidad del sector, sino que también permiten a los agricultores tomar decisiones más informadas y adaptadas, promoviendo una agricultura más resiliente y productiva.