Gestión de conocimiento y servicios de extensión, binomio fundamental para la agricultura familiar

La unidad de comunicaciones y gestión de conocimiento del CIATparticipó en el curso-taller sobre extensión en agricultura familiar en Centroamérica que se llevó a cabo en Antigua, Guatemala, entre el 23 y 25 de marzo, con el objetivo de desarrollar un análisis de procesos para el desarrollo y fortalecimiento de sistemas de innovación territorial para la agricultura familiar.

El Proyecto Insignia de Agricultura Familiar (PIAF) del IICA y el Programa Regional de Investigación e Innovación en Cadenas de Valor (PRIICA), organizadores del evento, invitaron al CIAT a exponer su modelo de gestión de conocimiento y la teoría de cambio frente a la extensión agrícola. De igual forma, participaron otras entidades del sector como CIMMYT, CATIE, SICA, entre otros. Las diferentes charlas se complementaron con experiencias locales como los Centros de Aprendizaje para el Desarrollo Rural (CADER) del Ministerio de Agricultura de Guatemala, el enfoque del Programa de Agricultura Familiar de El Salvador (IICA-El Salvador). También participaron representantes del Instituto de Nutrición para Centroamérica y Panamá y el Programa PRESANCA de FAO con sus enfoques de extensión para comunidades rurales con el tema de seguridad alimentaria y nutricional.

La agenda del curso-taller también incluyó una salida de campo en el que se intercambiaron conceptos fundamentales asociados a innovación, gestión de conocimiento y extensión para la DSC_0020agricultura familiar. En dicha salida se visitó un proyecto de agricultura familiar en el municipio de Santa Cruz Balanyá, departamento de Chimaltenango, donde mujeres indígenas (de origen kakchikel) cultivan diversos productos para su autoconsumo y comercialización, garantizando seguridad alimentaria y propiciando relaciones más equitativas en sus círculos familiares.

Como temas transversales a la relación entre gestión de conocimiento (GC), servicios de extensión agrícola y agricultura familiar (AF) se trataron los siguientes:

  • La familia como unidad de GC: pues allí se identifican buenas prácticas para compartir conocimiento, de forma horizontal; se posibilita el diálogo intergeneracional y se dan procesos de transformación que se irradian a toda la comunidad.
  • Enfoque de género: pues se propician cambios en los roles tradicionales de la familia, se da un incremento de la valoración del rol de la mujer y se fomenta un mayor equilibrio en las relaciones del hogar en todos sus ámbitos y posibilidades.
  • Identificación de las necesidades de las familias: mediante procesos de investigación participativa.
  • Sinergias territoriales: surgen relaciones y vínculos entre diversas experiencias comunitarias, como por ejemplo las prácticas agrícolas demostrativas, los huertos escolares y los procesos para mejorar la nutrición y la salud en el territorio.
  • Fortalecimiento de capacidades: especialmente las ligadas a asuntos como la asociatividad y la autogestión de negocios, para que las familias participantes en los procesos apliquen nuevos conocimientos que incrementen su calidad de vida.
  • Comunicación: aplicación de metodologías, herramientas y prácticas que aumenten la posibilidad de diálogo, aprendizaje y difusión en los procesos de AF.

 De igual forma, se identificaron algunas prácticas y metodologías que, desde la GC, fortalecen la relación entre los servicios de extensión y los proyectos de AF, como los talleres de identificación de oportunidades, los planes finca-hogar, las escuelas de campo (ECA), los talleres hogareños, las redes de fincas (prácticas exitosas), el uso de guías técnicas, la captura de tecnologías locales y los ejercicios de reconocimiento entre instituciones (mapeo de actores), entre otros.

El curso-taller finalizó con algunas reflexiones sobre las orientaciones que los profesionales de las instituciones participantes podrían sugerir a los tomadores de decisión, para que apoyen la innovación en AF en Centroamérica:

  • Promocionar la AF como una oportunidad de mejorar la calidad de vida de las familias por medio de la generación de empleo, ingresos y alimentos en los hogares, para incrementar la productividad de alimentos de la comunidad, contribuir a mejorar la nutrición de la población y la actividad económica con equidad, por medio del involucramiento de todos los miembros de la familia.
  • En la AF se deben impulsar procesos educativos de buenas prácticas de conservación de suelos y manejos de cultivos, implementación de innovaciones, generación y aplicación de nuevos conocimientos a partir de la experiencia, formando formadores que permitan replicar los conocimientos en las comunidades, considerando el valor del ser humano y el aprender haciendo.
  • Fortalecer el tejido social de actores a través de la AF, cultivando las relaciones sociales de la comunidad, generando confianza y cooperación conjunta para el empoderamiento de las innovaciones e incentivando la autogestión.
  • Los recursos naturales juegan un papel fundamental en la promoción de la AF y la producción de alimentos, por lo cual deben impulsarse procesos innovadores y sostenibles de manejo de los recursos agua y suelo, considerando que cada vez se producen menos y se necesitan más alimentos para satisfacer la demanda de las poblaciones.

Vea aquí la presentación del CIAT en el curso-taller sobre extensión en agricultura familiar en Centroamérica.