Research Articles Una espiral descendente: cuando las comunidades de subsistencia luchan, los bosques también lo hacen
Aunque tradicionalmente han sido ejemplo de prácticas sostenibles, las comunidades de subsistencia se enfrentan a circunstancias socioeconómicas cambiantes. Un estudio científico analiza lo que estos cambios poco conocidos significan para la deforestación.
Las comunidades de subsistencia suelen depender de los recursos naturales para satisfacer sus necesidades básicas. Según la FAO, el 90% de las personas que viven en la pobreza extrema en todo el mundo dependen de los bosques para al menos una parte de su sustento. En general, no se considera que estos grupos sean los causantes de la pérdida y degradación de los bosques; de hecho, tradicionalmente se les relaciona con una baja huella medioambiental y de carbono.
Sin embargo, nuevas evaluaciones sugieren que esto está cambiando debido a factores socioeconómicos que estimulan la demanda de recursos naturales.
¿Qué convierte a los "medios de vida sostenibles" en impulsores de la deforestación?
En la revisión "Huellas de carbono de la degradación forestal y la deforestación por parte de las poblaciones con necesidades básicas", publicado en octubre de 2022 en la revista Huellas de Carbono, los investigadores evaluaron 161 comunidades con necesidades básicas a través de 101 estudios científicos y descubrieron que las actividades de subsistencia de estas poblaciones pueden volverse insostenibles a través de cambios en el contexto y factores socioeconómicos, lo que lleva a "espirales ambientales descendentes", que a su vez aumentan las huellas de carbono a través de la deforestación y la degradación de los bosques.
Wendy Francesconi, primera autora del artículo, es una científica ambiental senior (dirige la investigación sobre servicios ecosistémicos e impacto ambiental) en la Alianza de Bioversity International y el CIAT, un centro internacional de investigación.
Explica que este estudio pretendía identificar qué prácticas de subsistencia se asocian más a menudo con la pérdida y degradación de los bosques: "Esta revisión abarcó algunas de las actividades económicas y de subsistencia más comúnmente conocidas, llevadas a cabo por las comunidades rurales y tradicionales; desde la cría de animales, la producción de cultivos y la pesca; hasta las prácticas ilegales, los productos forestales no madereros y la recolección de madera".
Estas prácticas deberían ser reconocidas por sus efectos a nivel global y comunitario. Esto expresa Francesconi:
"No conocemos el verdadero alcance de la deforestación y la degradación forestal provocadas por la pobreza. Aunque es bien sabido que los sectores industrial y comercial son los principales responsables de la crisis climática y de la biodiversidad, las comunidades de subsistencia se verán directamente afectadas por los cambios inmediatos en la prestación de servicios ecosistémicos, ya que dependen en gran medida de ellos".
Factores contextuales señalados con más frecuencia por los estudios de caso revisados al describir las poblaciones con necesidades básicas, la deforestación y la degradación forestal.
Cerrando brechas con soluciones basadas en el contexto
La deforestación y la degradación provocadas por la pobreza son un problema complejo y difícil de medir. Pero al comprender mejor los factores desencadenantes y las prácticas insostenibles, los investigadores también pueden identificar soluciones impulsadas por el mercado, inclusivas y específicas, para ayudar a frenar o invertir esta fuente potencialmente importante de cambio de la cubierta terrestre y de aumento de las emisiones de carbono.
Basándose en la investigación de larga data de la Alianza de Bioversity International y el CIAT con comunidades de subsistencia para comprender la relación entre la agricultura, los cambios en la cubierta terrestre y la extracción de recursos, Francesconi afirma que las soluciones serán tan variadas como el número de comunidades de subsistencia: deben adaptarse a la cultura y costumbres de una comunidad, al contexto geográfico, a los sistemas alimentarios y de producción, e incluir transformaciones basadas en el mercado que promuevan actividades de subsistencia sostenibles.